El relleno de esta receta se puede utilizar para rellenar canelones, lasaña, piquillos, crêpes, volovanes, tartaletas... o hasta como masa de croquetas (dejando espesar la masa más tiempo).
- 1 cebolla
- 400 gr. de leche entera
- 50 gr. de harina
- 2 cucharadas de la grasa del confit
- sal y pimienta
- nuez moscada rallada
- 2 confit de pato
- queso mozarella y cheddar para cubrir
- un poco de nata líquida
Ponemos en un cazo la grasa, cuando esté caliente añadimos la cebolla picada y dejamos pochar a fuego lento durante 15 minutos. Luego añadimos la harina, con cuidado de que no se queme, simplemente que se cocine un poco. Añadimos la leche y removemos, sin parar, con una cuchara de palo, o mejor, unas varillas. Añadimos una pizca de sal, una pizca de pimienta, una de nuez moscada rallada y mantenemos al fuego hasta que espese.
Rellenamos los canelones o montamos la lasaña. Cubrimos con el queso rallado, vertemos un chorrito de nata líquida y gratinamos en el horno hasta que la superficie se dore.
No hay comentarios:
Publicar un comentario