Esta delicatessen me encanta. Es una receta un poco laboriosa, pero cuando muerdes el chocolate, cruje, y empiezas a saborear la naranja confitada, no demasiado dulce... nos percatamos de que el trabajo ha merecido la pena.
- 4 naranjas
- 3 tazas de azúcar
- 1 taza de agua
- azúcar blanco o glas(para rebozar)
- 500 gr. de chocolate negro de cobertura (si las queremos bañar de chocolate)
Lavamos bien las naranjas para quitarle los posibles pesticidas y demás suciedad que puedan traen pegadas a la piel.
Cortamos los dos extremos y con cuchillo bien afilado, cortamos por 4 partes la piel de la naranja, de manera que la separemos del resto de la naranja en cuatro trozos. (La pulpa la trituramos y la tomamos en zumo.)
Cortamos las pieles de las naranjas en tiras de 1 cm. de ancho aproximadamente, procurando que nos queden del mismo tamaño.
Ponemos las tiras en un cazuela con agua fría, cubriéndolas, y las ponemos a hervir. Cuando rompa el hervor, las colamos. Y repetimos este proceso dos veces más. Esto es para quitar el amargor de las pieles.
Escurrimos y reservamos.
En el mismo cazo ponemos el azúcar y el agua, removemos y dejamos que hierva hasta que se disuelva el azúcar. Añadimos todas las pieles de naranja, bajamos la temperatura y dejamos hervir a fuego suave hasta que veamos que las pieles empiecen a ponerse transparentes. Dependiendo del tipo de naranja y de la cocina de cada uno tardará más o menos, pero viene a ser unos 40/50 minutos.
Escurrimos bien las pieles y las rebozamos en azúcar, poniéndolas una a una sobre un papel de horno, en una bandeja. Las vamos colocando bien ordenadas y procurando que queden lo más estiradas posible. Las dejamos en las bandejas para que sequen, cubriéndolas con un paño seco y limpio.
El tiempo de espera dependerá de la humedad de cada lugar. A mí (que vivo en la costa) me tardan 2 días en secar.
*Las naranjas confitadas las podemos guardar tal cual en una lata o un tupper y duran muchísimo tiempo. Cuanto más azúcar tengan alrededor, mejor se conservarán. Después podemos utilizarlas para cualquier preparación (bizcocho, cake, roscón...) o preparar las orangettes.
*Para hacer el roscón de Reyes o Pascua yo las confito en rodajas, y las guardo (sin rebozar en azúcar) en un bote con el almíbar en que las hemos cocido. Otra forma de hacerlas, coservarlas, y utilizarlas.
Si las rebozamos en mucho azúcar se secan mejor y se mantienen más tiesecitas.
Para hacer las orangettes (cubrirlas de chocolate):
Fundimos el chocolate de cobertura al baño maría, a poca temperatura. Lo más cómodo es hacerlo en el microondas, al 50% de potencia, parando cada dos minutos para removerlo y comprobar que no se nos queme.
Sacudimos el exceso de azúcar de cada tirita de naranja y la bañamos en el chocolate con ayuda de un palillo de brocheta, unas pinzas... y las vamos colocando sobre otro papel de horno, bien ordenaditas, sin tocarse.
Las dejamos enfriar a temperatura ambiente, las despegamos del papel y las guardamos bien envasadas en el frigorífico hasta que las vayamos a consumir, que las quitaremos con antelación para que no estén tan frías.
Qué delicia.. realmente me encantaría hacerlas pero tengo que buscar tiempo en la agenda.. De momento me las apunto porque sería pecado por mi parte perdérmela.
ResponderEliminarBesotes.